Nueva Delhi: prominente activista de Baloch Mahrang Baloch ha acusado a las fuerzas de seguridad paquistaníes de abrir fuego contra manifestantes pacíficos en la quetta de Pakistán, lo que resulta en múltiples lesiones y una muerte.
Llevando a X, condenó el incidente, declarando: “En Quetta, la policía abrió fuego indiscriminado a manifestantes pacíficos, dejando a muchos heridos y un manifestante muerto. Así es como el estado responde a manifestaciones pacíficas en Baluchistán”.
La situación de los derechos humanos en Baluchistán también se planteó en la 58ª sesión del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas (ANHRC) en Ginebra.
Niaz Baloch, coordinador del Departamento de Relaciones Exteriores del Movimiento Nacional Baloch (BNM) y miembro del Comité Central, destacó la represión continua en la región.
Afirmó que organizaciones políticas como el Azad de Organización de Estudiantes de Baloch (BSO-A) y el BNM enfrentan severas represiones, y los miembros son detenidos, acosados y silenciados arbitrariamente.
“Las desapariciones forzadas se han convertido en una herramienta sistemática de opresión en Baluchistán”, dijo, enfatizando la gravedad de la disaster.
Citó casos recientes de desapariciones forzadas, incluida Beeberg Zehri, miembro del comité central del Comité Baloch Yakjehti, y su hermano Hammal Zehri, un científico. El vicio del psiquiatra y el Colegio Médico Bolan, Ilyas Baloch, también estuvo entre los que desaparecieron por la fuerza, junto con más de una docena de miembros de la familia Qambarani. Según los informes, la activista de derechos humanos Saeeda Baloch y su hermana también fueron arrestados.
Los asesinatos extrajudiciales por grupos respaldados por el estado aumentan aún más la disaster, alegó Niaz Baloch. Señaló el brutal asesinato de Shah Jahan Baloch, el hermano del presidente desaparecido de Bso Azad, Zahid Baloch, en Naal como un ejemplo de “castigo colectivo infligido a las familias de Baloch”.
Según BNM y otros grupos nacionalistas de Baloch, las desapariciones forzadas, los asesinatos dirigidos y las tácticas de intimidación están siendo utilizadas por el gobierno paquistaní para suprimir activistas políticos y defensores de los derechos humanos en la región.